Personas.

El capital humano que le da vida a nuestra Facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de Querétaro es uno de los pilares que sostienen las funciones educativas, de investigación y vinculación que ofrecemos a la sociedad. En este sentido, es meritorio el compromiso y esfuerzo de la comunidad que integra nuestra Facultad para lograr la misión institucional, que a la letra dice: Formar capital humano en el campo de la ingeniería, las ciencias físico-matemáticas, la arquitectura, el diseño y las tecnologías con proyección internacional, con capacidad de liderazgo, emprendedor, competitivo e innovador a través de sus programas de licenciatura, posgrado y técnico superior universitario, además de contribuir a la generación y aplicación del conocimiento para atender problemáticas sociales, ambientales, científicas y tecnológicas que nos permitan transitar hacia una mejor sociedad.

No tengo duda que cada quien a su estilo y experiencia realiza una labor personal alineada a esta importante misión. Sea este espacio el medio para expresar mi reconocimiento a todas las personas que de una u otra manera han contribuido a lograr lo que al día de hoy es nuestra Facultad de Ingeniería.

 

Considerando el crecimiento que tenemos de población en nuestro Estado de Querétaro, así como las nuevas condiciones sociales y económicas que se esperan para los siguientes años, principalmente en lo que se refiere al desarrollo de nuevos puestos de trabajo es necesario considerar cambios que nos permitan responder de manera efectiva a los requerimientos de la sociedad.

 

 

Así mismo, tomando en cuenta el incremento de nuestra matrícula estudiantil entre 2018 y 2023, se prevé que requeriremos una mayor cantidad de profesores, investigadores y personal administrativo.

 

 

En este sentido, uno de mis compromisos es dar certeza laboral a todos nuestros profesores que actualmente colaboran para lograr la misión de nuestra Facultad. Al respecto, habrá que trabajar caso por caso para lograr cargas académicas balanceadas, así como procesos de contratación en tiempo y forma, reconociendo la importante labor educativa con salarios justos a nuestros profesores y un trato digno y cordial. Esto no es otra cosa más que ser empáticos con nuestros profesores que me hicieron llegar su sentir en la Aplicación de la Metodología FODA para nuestra Facultad, la cual inicié desde hace unos dos meses.

Como resultado de dicho estudio, se reconoce que habrá que recuperar el tejido académico de forma que el clima laboral permita la interacción y sinergia entre nuestras y nuestros estudiantes, profesores e investigadores de diferentes áreas de Ingeniería, propiciando espacios de trabajo colaborativo en beneficio de todos. No se nos olvide, como formadores de personas que nuestras y nuestros estudiantes no solo aprenden en las aulas o laboratorios, nuestra actitud y forma de ser se proyecta en la formación de las personas que están a nuestro alrededor.